El periodista de espectáculos se encontraba justo en el área de los leones cuando su carro se detuvo, empezó a echar humo, hasta que el motor explotó.Nuestras fuentes nos actualizan la información: una vez estando en el hospital, Raúl sólo fue tratado por intoxicación de inhalación de humo y afortunadamente sólo tuvo pequeñas quemaduras superficiales sin importancia, aunque todavía tiene la presión muy alta, probablemente por el susto.
Molina tuvo que esperar 20 minutos en ser sacado de su Mini Cooper y no fue por los rangers del Safari, sino por una familia que lo vio.
A través de su Twitter, hace unos minutos, Raúl de Molina escribió: "no se preocupen, el lunes les contaré todo en El Gordo y la Flaca".
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