Argentina se convirtió la madrugada del jueves en el primer país de América Latina en aprobar una ley federal de matrimonio entre homosexuales, luego que el Senado aprobara un controvertido proyecto de ley apoyado por el gobierno.
Tras recibir 33 votos a favor, 27 en contra y tres abstenciones, la iniciativa les da a los homosexuales que se casen todos los derechos jurídicos que tienen las parejas heterosexuales en el país sudamericano.
El voto llegó luego de una maratónica sesión y una jornada marcada por manifestaciones a favor y en contra del proyecto en las afueras del palacio del Congreso. La iglesia católica argentina había organizado una fuerte campaña en contra de la iniciativa.
La Cámara de Diputados ya había aprobado en mayo el proyecto, que cuenta con el apoyo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Según el texto del proyecto, "el matrimonio tendrá los mismos requisitos y efectos, con independencia de que los contrayentes sean del mismo o de diferente sexo". Uno de los puntos más controvertidos de esta equiparación ante la ley es que habilita a parejas de homosexuales a adoptar niños.
La Ciudad de México aprobó este año una ley que permite las bodas de personas del mismo sexo.
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